Edificios emblemáticos de Nueva York se vestirán de naranja la semana que viene para crear conciencia de que en esta ciudad símbolo de opulencia y centro financiero mundial, más de un millón de personas, sobre todo niños y ancianos, no tienen para comer.
Para ello el Banco de Comida de Nueva York ha lanzado una campaña, llamada “!Ponte de naranja!”, mediante la cual teñirá de color naranja edificios como el Empire State Building, el Lincoln Center, las torres de la compañía de electricidad ConEdison en Union Square y la de Nasdaq en el sector turístico de Times Square.
Y es que, más de un millón de neoyorquinos dependen de comidas de emergencia y de la comunidad para sus alimentos. Para combatirlo el Banco de Comida de Nueva York distribuye alimentos que reciben de iglesias y otras organizaciones, a niños y mayores de 65 años.
La dotación financiera del Banco de Comida de Nueva York procede de una asignación de fondos federales, de la ayuda del Gobierno local y de donaciones de empresas privadas de alimentos. Pero, un recorte de los fondos federales en los últimos tres años ha reducido en casi 5.500 toneladas las reservas del Banco disponibles para esos programas, por lo que la organización ha lanzado dicha campaña.
Y si descansamos, tomamos café, hacemos pis... 
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